¿Sabe Ud., querido Bolo, que el robot de miarroba -ese ente impersonal pero de leal memoria- acaba de felicitarle el cumpleaños a fusa (7)?? Parece mentira. Eso suma 9 años desde el inicio en el proceloso y divertido Mundo Clásico.
Tempus fugit, amigo mío. No sólo para los grandes escritores, como Delibes. Sino para los pequeños garabateadores de momentos, y para los enredas virtuales.
Así que hoy, Sr.mío, siete años después y tal como hizo Miguel D'Ors con la lecherita de Burdeos en aquel Ubi Sunt imperecedero.... no puedo más que decirte:
Ya lo ves: toda aquella gente rica que a tí te confundía con un poco de nada, con los muros cubiertos de verdín de las calles,/ con los brillantes prados de las afueras, toda aquella gente, sus pelucas, sus bailes, sus libros, sus modales/ delicados, sus coches, sus cadenillas de oro, sus chocolates, su fraternité... son ya -que pronto- polvo olvidado en el polvo./
Y aquí estás tú, con tu mirada ardiente y tus mejillas de manzana girondina, con diecinueve años eternos. Quién te hubiera dicho que ibas a ser lo único que quedase de aquel mundo aquel día en que aquel extranjero viejo, gruñón y sordo se empeñó en retratarte.
......aquí estamos, amigo mío. Mientras dure la intención y la memoria.
Me llamarán duro de corazón, pero no me conmueve la muerte de los viejecitos. Lo que me conmueve es que los mantengan cuando no tienen ganas.
Y es que los que te rodean se ponen muy pesados con lo que llaman "tu salud", pero en realidad es "tu mantenimiento sea como sea". Yo creo que les da pereza y grima incinerar.
Y oigan, no lo nieguen, ustedes se conocen de hace mucho.
No puedo discutir contigo, Nan. No y no. No puedo (qué fastidiooooo!). No creo que los mantengan, a los viejecitos, por pereza de incinerarlos. Los mantienen porque no quieren desprenderse. Porque no quieren tomar una decisión que duele y de la que serán responsables. Porque prefieren no pensar, no decidir, no contradecir el manual de usos y protocolos médicos.
Por eso es importante hacer un testamento vital. Dejarlo dicho. Escrito ante testigos. Avisado.
Somos tan responsables de nuestras vidas como de nuestras muertes. Ninguna de esas dos cosas son menos naturales o importantes. Morir como se ha vivido: decidiendo libremente. Vivir como se querría morir: enterándose.
Y no, señorito Nan, QuiaSint y yo no nos conocemos: ardería Troya (o Ítaca, ji ji ji....) si fuera de otro modo. Somos sombras, imágenes y vestigios... en huída libre y hacia adelante. ¿Qué mejor compañía se puede tener en esta vida extraña que una con la que no se cuenta?? -Nada más fiel, por mi parte.
Y ahora me piro a Septiembre, que es un remanso calmo y perfecto para poner huevos (con perdón).
No me refería a eso, Hit-ita mía. A los finales en los que, como se me pongan tontos, los mato a todos con la barra esa que sostiene los sueros.
Me refiero, porque ya soy un señor bastante mayor de 62 años, a ese no bebas tanto, no fumes nada, no te turbes, ni masturbes ni te pierdas por las noches de las urbes (et orbe).
Y la cosa venía porque hace algo más de 10 años, un amigo mío pintor, para el catálogo de una exposición, contó entre otros, con un texto de Delibes. Me contaba que en cuanto la esposa los dejaba con el café le urgía a mi amigo a que encendiera un cigarrillo para él (Delibes), pero lo colocara en el cenicero de modo que pareciera que lo estaba fumando él (mi amigo).
Me parece patético y en mi santa casa he recurrido muchas veces a esos trucos. Además del de salir cada rato a tomarme un chupito de güisqui y echarme un cigarrito (mi hijo, cuando viene por casa y ve eso me llama "el fuguilas"). A lo mejor don Miguel hubiera muerto hace cuatro años. ¿Mereció la pena ese tiempo de más?
Por otro lado, nada mejor que la compañía de una sombra, así que les felicito. (Aunque mi morbosidad natural de oidor de historias se haya desinflado).
Menos mal que queda por contar la historia de sus viajes en el tiempo. Pero ya que se ha ido a septiembre, dígame, ¿subió el IVA, cayó el cielo sobre nuestras cabezas, Esperanza Aguirre es la Presidenta parala etermidad de la comunidad europea?
¡Madonna del Santo Espíritu! Qué bueno verla por aquí. Niña feliz a la que sus padres la tuvieron. Si pierde su guerra de fin de semana, no se preocupe, lo importante son las batallas. Céntrese en ellas. Los mejores libros bélicos están centrados en las batallas, Waterloo, El Ebro, Las Ardenas...
Y luego la tuvimos a ella, sip. Xactamente. Faustita mobilette. Que nació talludita y brincoteante. Viva y llena de letras. Y ahí sigue, una mano en la cazuela, la otra en el matamoscas, los pies en la tierra y la cabeza..... ¡¡vaya a Ud. a saber en cuantas cosas a la vez!!
A veces, Sirwood, tengo que obligarme a recordar que su manejo de alejandrino de los interneses le dejan llegar a playas muy lejanas... ¡quite esa espalda de tatuaje tan reconocible! jajajaaaaa..... ¡ay! el día que no vaya poniendo chinchetas en el mapa virtual habrase acabado el mundo.... ¡¡qué chico éste!!
¿Hit-ita??? ...mira NáN, vas a tener que dar muchas explicaciones, oh, sí-sí.... Nooooo... si Swenks y Szawek sólo te sujetarán los brazos para tu comodidad.... ¿las cuerdas y el cemento?? ....por si te resistes, claro!... explica, explica.... primero lo del " ya soy un señor bastante mayor de 62 años" y segundo: ¿El por qué te dejas mangonear en tu propia casa?
¿Pe, pe, peeee.... PERO A DÓNDE VAMOS A LLEGAR??? Me lo expliques voluntariamente (Swenks, Szawek... ¡achtung! )
Aaahhh.... que se me olvidaba.... Que no! Que os galegos.... non temos morriñas da Setembre futuro, ainda del pasado. E mais en outra casa que a nosa propia.
A mí un bocazasssssss me dejó escrita una cita de Tsun Zú: “Aparece donde no puedan ir, dirígete hacia donde menos se lo esperen”.... y he tenido que tomarme la justicia (poética) por mis fueros. Como un cuco. O un tumor. Tal cual.
Para empezar, ser hitita es un lujo hoy en día. Que no lo sepa apreciar dice muy poco de su excelencísima.
Para seguir, Sw y Sz me la pelan, lo digo así de crudo porque ese es el lenguaje que entienden. Solo me dan miedo las SA.
Para acabar, se basan en los 70 cm de arterias de goretex que tengo. No se dan cuenta de que es una suerte porque si hago alpinismo y me quedo trabado en una zona helada, habrá una parte de mí que no se congelará. Así que se ponen como basiliscos. Y a mí me gusta que me dejen tranquilo.
Además, me permite vivir una vida de mentiras... Y además soy un blandengue, que tenía que haber cogido el paquete de tabaco y haberme ido de casa. Todo corazón, que soy.
No sé si las perrucias del dueño de este blog confundieron una trufa o una criadilla con una mina unipersona.... y que anden los restos de Sirwood (digo de QuiaSint) arrastrados por otras alimañas distintas a las que pululan por la virtualidad.... ¡Oh, mores! (lagrimilla)
Es que se me ha complicado un poco la existencia. No hubo trufas. Tuve que ir a un entierro donde Cristo perdió el gorro. Luego enfermó una sobrina y tuvieron que internarla en un hospital. He estado haciendo turnos de noche para cuidarla. Afortunadamente, se ha recuperado del todo. Lo sé, no por el parte médico, sino porque ha vuelto a hablar por los codos; a todas horas, en todo momento y lugar. Vuelta a la normalidad. ¡Por fin!
Jo, Sirwood, es usted todo un Tío. Me alegro por la chica. A ver si con suerte, de tanto hablar la tiran del hospital, porque huelen a desinfectante y cocinan de pena. (y no hay manera de fumar a las escondidillas).
Ya la han despachado (gracias por el interés). Ahora habla más y mejor. Y dice que de mayor quiere ser doctora (médica, dice). ¡Ah!, se me olvidó decirles: el entierro era con acompañamiento de banda de música desde la iglesia hasta el cementerio. Una chulada. Me voy a pedir uno así.
Así es como deberían ser todos los entierros: con pompa, boato y banda de musica.
Hay entierros sorprendentes. Y también funerales. Recuerdo uno que me dejó particularmente pasmada. Fue hace unos diez años. Se había muerto el padre de una chica que había sido novia de varios de mis primos... sí. Parece que le gustaba mi familia. Ahora anda por ahí, en los periódicos, dando guerra con cosas de arte moderno....
La cosa es que, hacia el final del funeral, se levanta (la chica) muy seria, se dirige al púlpito, le hace una señal con la cabeza al sacerdote, saca un papel y empieza a desgranar su particular "ubi sunt". -Temo esos momentos, desde aquel día.-
Todos los fieles (y algún pagano que también había ido a acompañarles en el duelo) estábamos compungidos y expectantes.... La chica empezó a hablar:
"Papá, cuánto te queríamos.... y ta, ta, ta.... me enseñaste a colocar los pies en los estribos.... ta, ta, ta..... aún recuerdo lo que te comiste la última noche: un plato con guisantes y sus trocitos de jamón, un buen solomillo de unos 400 gr. medio hecho y con patatas. La ensalada, con sus anchoas y su tomate. El flan de huevo de tamaño mediano, el yogur, el plátano....."
Medio funeral se fue a un restaurante, a continuación.
Así es como deberían ser todos los entierros: con pompa, boato y banda de musica.
Hay entierros sorprendentes. Y también funerales. Recuerdo uno que me dejó particularmente pasmada. Fue hace unos diez años. Se había muerto el padre de una chica que había sido novia de varios de mis primos... sí. Parece que le gustaba mi familia. Ahora anda por ahí, en los periódicos, dando guerra con cosas de arte moderno....
La cosa es que, hacia el final del funeral, se levanta (la chica) muy seria, se dirige al púlpito, le hace una señal con la cabeza al sacerdote, saca un papel y empieza a desgranar su particular "ubi sunt". -Temo esos momentos, desde aquel día.-
Todos los fieles (y algún pagano que también había ido a acompañarles en el duelo) estábamos compungidos y expectantes.... La chica empezó a hablar:
"Papá, cuánto te queríamos.... y ta, ta, ta.... me enseñaste a colocar los pies en los estribos.... ta, ta, ta..... aún recuerdo lo que te comiste la última noche: un plato con guisantes y sus trocitos de jamón, un buen solomillo de unos 400 gr. medio hecho y con patatas. La ensalada, con sus anchoas y su tomate. El flan de huevo de tamaño mediano, el yogur, el plátano....."
Medio funeral se fue a un restaurante, a continuación.
Coño, pues el de mi padre fue así, con la banda municipal y un coche funerario tirado por caballos negros. Como tenía 11 añitos, me enviaron a casa de mi amigo Fernando. Los dos padres trabajaban en la Junta de Obras del Puerto (bueno, el mío ya no) y teníamos permiso para entrar en el puerto a jugar. Cogimos las bicicletas y nos fuimos hasta el faro. Armados con piedras, nos quedamos inmóviles esperando que un pez se acercara a la superficie y le pudiéramos acertar.
De pronto, sonaron las campanas de la concatedral y le dije a Fernando que seguro que era por mi padre y quería ver el entierro. En el tiempo en que el cortejo recorría los 300 metros escasos que había de mi casa al principio de la Rambla, hicimos los más de tres km hasta el mismo lugar, llegando sudorosos y con la camisa fuera de los pantalones. Se había formado una fila de gente y yo insistía en pasar, sin soltar la bicicleta, a primera fila. Cuando me reconvinieron hice valer mis derechos con un "Es que el muerto es mi padre". La mentira y falta de respeto del pillo fue debidamente castigada. Me dieron una somanta de hostias. Pero entonces Fernandito, que sí me reconocía la posición de privilegio, se hizo cargo de las dos bicicletas y me encaramé a una de las ventanas del Banco de España, desde donde lo vi todo estupendamente.
Y yo, sin embargo.... podría describir minuto a minuto todo lo que pasó... y con qué velocidad se fueron dispersando unas queridas cenizas, por el lecho de un río truchero de Sanabria.
Ayer estuve sentada en un banco de piedra que está muy cerca de donde ella descansa. Era uno de esos días duros-duros, de cuando la vida se pone de punta y te clava una arista: así que, también, necesité ponerme un viejo sueter de lana de él. Uno que me quedé, por las buenas, cuando él vivía (porque estaba de moda). Así que dejé pasar los minutos esperando que todo hiciera su efecto. Y lo hizo. Es un sitio muy vivo, donde los muertos descansan.
Me gusta leer las palabras que grabamos sobre la piedra. Unas que encontramos escritas en un papelito guardado en su boureau: " Señor dame serenidad para aceptar las cosas que no tienen remedio; valentía para cambiar las que se puedan, sabiduría para reconocer la diferencia".
Me pregunto cómo puede ser que a la distancia diariamente yo recorra los recuerdos como si estuvieran presentes. Y hay noches que me despierto. Sí. Y sentada en la oscuridad, envuelta en las sábanas, intento recordar qué es lo que me estaban diciendo.
Y es misterioso todo. Misteriosa la alegría que no puedo contener, cada día, y que no tiene motivos concretos. Misterioso el efecto de las palabras de la tumba de mi madre que me ayudan a aceptar con serenidad que ella, él y muchos otros ya no están. Y no estarán. Misterioso como un sueter puede convertirse en un abrazo protector contra el que la esquina más afilada no tiene nada. Pero nada de nada.... que hacer.
;-))
Querido Sirwood: creo que abandonaré ya su Septiembre. Ha sido muy terapéutico. Gracias por dejarme okuparte (a parte de que "me lo debieras"... ja ja jaaaaa.... has sido un sol!)
Mi máxima preocupación era comportarme como John Wayne, que nadie me viera llorar.
De todos modos, mi historia con mi padre fue rara. Y con mi madre. He tenido que hacer una terapia de regresión en Donosti para rencontrame con ellos y entender muchas cosas. Rehacer muchas conexiones. Ahora estoy en paz y visitan mis sueños. Prefiero no hablar de esas cosas sin unas copas delante y otras atrás.
Por cierto, tengo unas historias vitales sobre muerte e infancia, algunas más graciosas, otras menos, que escribo una y otra vez sin llegar a encontrar la perspectiva distante que busco. La del entierro de mi padre empezó con 8 folios y ha ido adelgazando con el tiempo. Pero al escribir el resumen en tu blog, me he dado cuenta de que esa es la versión oficial. El 25 de mayo hará 50 años de su muerte y, si no os parece mal, porque lo había hecho para vosotros, copiaré este comentario en mi blog, dándolo como la versión casi definitiva.
Menos mal que has vuelto, Dña.Luna! Había aquí una ausencia enorme (y un desorden!) Todo el tiempo era de día, y las mareas estaban alocadas, y las mujeres -claro-, también...
Me alegro que la alegre, y también de que haga acto de presencia, y de que cuente.
Pero tenga en cuenta que ha sido un lapsus, lo del descorazonarse; no se vaya a creer (ahora hablo por mí) que soy buena persona por un momento de abatimiento.
Ju ju juuu... ¡y va y lo explica! Diossssssssssssss.... (que sí existe, por supuesto): ¿Creerás, Sito Nan, que no te hemos visto los paños interiores??? Que me parto! Buena persona hasta el tuétano.
Querida Luna; me ha hecho gracia lo del "horribilis sarcasmus". Y me ha hecho darme cuenta de algo. Desde siempre me han encantado los ogros. Las personas muy-muy antipáticas, las gruñonas. Resulta que, una vez domesticadas (el truco esta en no tenerles miedo, en plantarles -tranquilamente- cara), son tiernas, profundas, únicas. Adoro esas personas difíciles porque, generalmente, esconden muchos tesoros.
Cuando me has metido en el mismo saco que a esos dos trotamundos.... he pensado que la edad (provecta, sniffsss!) me está haciendo pasar de ser burlona a ogra. Ohhh! Deberé estar atenta: quizá quieran domesticarme con paciencia y muchas oportunidades. ¿Qué es la amistad sino esa oportunidad que das a otro de ser quién es, sin prejuicios?
Explico: Y no por lo de "tierna, profunda y única" (lo de ogra); sino por lo de gruñona. Que mi inmodestia no llega tan lejos... XD
It
Otra cosa: Nansito NO SERÉ YO quien aplique la Ley Sinde sobre los recuerdos de aquel día de su niñez. NO SERÉ YO quien mande cortarle las manos (desde los codos) por atentar contra los sacrosantos copyrights del apartado "comentarios" de QuiaSint.... pa' que vea. Hale, chinito: valore, valore.......
Ay, ay, aaayyy... Nansito !! Como diga Ud. una sola palabra más le voy a declarar mi adhesión eterna (de lis buenos ratos que me está haciendo pasar.... Jo jo jooo)
Éstas son las cosas -y no otras- por las que venero internet. Por los enredos "inter nos"
Vaya, Luna, no sabía lo del accidente. Espero que te repongas muy pronto del todo. Nunca he tenido un accidente, nunca he estado ingresado en un hospital, pero después de lo de mi ahijada, he decidido que no quiero. ¡Menudo susto!
A estos dos no les hagas mucho caso, que siempre están chinchando. Si se meten contigo, avisa, que cojo la Guzzi, me presento en Madrid (creo que ya sé por dónde se va) y les arreo un par de soplamocos a cada uno, a ver si despabilan.
Voy un poco acelerado. Mañana me leo los comentarios con detenimiento, a ver si se me ocurre algo que decir (cosa siempre de lo más difícil).
Un abrazo a todos. (A Rosa, que me estará escuchando tras los apuntes, también).
Por no mencionar la sonda del pis. Siempre da la casualidad de que antes de ti iban a operar a uno de esos tíos del porno, que no se prsenta, y como tenían preparada la de su tamaño, por no ir al almacén te la colocan a ti. Mo-les-tí-si-mo.
¿Y qué es la sonda del pis frente al sonido de "te vamos a poner una vía", promesa sutil de que van a dejarte el cuerpo más picado que el brazo de un yonki....????
Ooojjjjjjjjjj..... meseponen los pelos de punta!
En fin. Lo mejor es no recrearnos en los fastidiosos (y a veces inhumanos!) usos y protocolos hospitalarios. Lo mejor es huir o someterse, sin darle un solo pensamiento. No es fácil, sobre todo si hay que sufrirlos durante tiempos largos. Pero se puede. Y un día, por fin -y aunque te digan "en 6 meses nos vemos"- te dan el alta. Y combatiendo las ganas de esconderte en cualquier selva donde nadie te haga nada más y la espada de Damocles de que alguna célula haya sobrevivido al holocausto de la quimio y de los rayos...
Es curioso, "síndrome de Lázaro", me he enterado que llaman los psiquiatras a los que sobrevivimos a un diagnóstico muy penoso. Supongo que será porque, inconscientemente, al saber que te "fusilarán al amanecer" (que es el anuncio de algunas enfermedades), te despides. Dejas de hacer proyectos, de pensar en el futuro. Así que, una vez aceptado y puesto en orden el entorno, si los ensalmos y emplastos funcionan... el enfermo se siente resucitado (¿Lázaro?) con todos los componentes de incredulidad, culpa, miedos ante lo incierto, etc....
La cosa es que, cuando me contaron ese síndrome, lo entendí al revés (¡lo que hace la ignorancia!); lo asocié con la maravilla de Khalil Gibrán, “Lázaro y su amada"... y aquí, Srs./as. mios/as viene mi recomendación: NO OS PERDONEIS ESA LECTURA!! (es una joya).
Contra cualquier síndrome, la lectura. Contra el miedo, razocinio.
Me doy cuenta de que es la primera vez que pongo palabras (y no distancia) a este episodio. Quizá porque, después de 4 años, estoy recuperando la voz. Quizá éste -el contarlo- sea el primer síntoma de que estoy entrando, ¿de cabeza? ¿haciendo el pino puente?, en el síndrome lazareño....
¡Mujeres, a mi! ¡Marta! ¡María! ¡Cacho vagas.... ¿ande estais, jodías?!!
Corrigiendo: (como escribo con un dedo, desde la infumable pantallura de un iPhone, escuchando laxtertulia de Carlos Herrera.... no sé ni lo que digo). QUE ANDE PONE: ...."(..) espada de Damocles...(..)", el párrafo está inconcluso. Y debería acabar al gusto, claro. Y que el mío, el que quería explicar es: que se puede vivir feliz. Porque la felicidad, ¡esa intocable!, la llevamos puesta, queridos míos.
¡San Blas!, Fusa, hay que cuidar bien esa garganta. Sepan ustedes que aquí la joven tiene una voz meliflua y cantarina, como podrían testificar los seguidores de aquel blog sonoro, uno de los primeros en su género, tristemente desaparecido. ¿Te acuerdas? Por cierto, cuando veas a Pedro Jota, dale un coscorrón de mi parte. ¿Has visto cómo han caído los resultados de El Mundo desde que dejaste de escribir? ¡Será burro el semi-calvo de las narices! ¡ Venga, Ágatha, mándalo a paseo de una vez!
Las cuarenta!, NaNsito, las cuarenta!! Esas son las que les voy a cantar!
M-E-L-I-F-L-U-A.... QuiaSint (ese crótalo!) ha dicho "meliflua"! ...en la calle le espero, bicho! y ya vemos quién se lleva el soplamocos, jajajajaaaaa.
Ahora en serio: Hace un mes he empezado (digo empezado.... ¡ojo al verbo!) a cantar. No es la voz de antes, pero no está nada mal -si pensamos que desde que me abrasaron las cuerdas (2) no podía ni tararear en misa-. Estoy recontenta. Sip. Así que lo que dure, será bienvenido.
Nansito: No tengo miedo. Nunca lo he tenido. ¡¡Si leyera "Lázaro y su amada" comprendería qué es lo que yo entendí que era el "síndrome" aquel!! jajajaaaaaa...
¡Vámonos todos a descansar unos días! (paga Luna los billetes....)
Bksssssssss a todos,
it
P.D. Bolo: el semi-calvo me deja enredar en unos y otras de sus publicaciones. Si es bueno (me debe un textículo....) le marco con el dedo una columnilla erotico-zezuah que hice durante unos meses y que ahí anda, para gloria y enseñanza de unos y otros... ji ji ji...
Donde voy, no hay que comprar billetes. Solamente desplazarse a una hora de madrid. Naturaleza pura y dura. Los cargos y los rangos no sirven para nada una vez que se pasa de las escuelas. Hay un bar con sabor rancio. Ni tiendas, ni sitio de comidas, ni nada de nada.El bar es el club social, el estadio ( por el futbolin) cuarenta habitantes. Si lo que les place, es la soledad...tiene su casa allí. Creo he traspasado mis límites de hablar en el blog. No es habitual que lo haga.
He vuelto del mundo primigenio, de un pueblo que coincide con el suyo, Luna cascabelera, en que tiene 40 bares. Habitantes, no muchos más, pero se mueven rápido para mantener los bares vivos.
Queremos leer ese texto de la Tauro favorita de este blog. A ser posible, de gratis.
Sirwood, ¿qué dice la Gaçette de Paguí de 1895 acerca del cambio climático?
Así queeee... en ese pueblo suyo, Nan, cada habitante tiene un bar (o es un bar en sí mismo). Lo que me lleva a preguntar: ¿cómo se mueven?, es decir: se sincronizan para no dejar ninguno desierto, hacen tablas, plannings.... ¡ay, qué sinvivir de pueblo, jopelinessssss!
"Tu depuradora no me había dejado dormir en toda la noche, cosas de los adosados. Así que la pasé en blanco leyendo hasta las tantas el último libro de Savater y engolfado con Internet, viendo los "trailers" de las películas que están estrenando en Nueva York, bajándome el último navegador, escudriñando el informe "secreto" de la Nasa sobre la Luna... en ese plan. No había amanecido aún y ya estabas en bermudas, al borde de la pileta, azacaneado con el limpiafondos, quitando las hojas de la superficie con el cazamariposas, retirando mosquitos de los "skimmers". Ayer estaba el agua casi verde y hoy ha amanecido transparente: se nota que el cloro, el algicida, qué sé yo, el elevador del ph, han hecho su efecto. Me pareció que la habías rellenado porque quedaban rastros de espuma en la superficie: un día me contaste que el agua de esta "urba" tiene muchos carbonatos y hay que precipitarlos con alúmina. Amorosamente esparcidos junto a bordillos y escalerillas pude ver cuatro manguitos de los de aprender a nadar, tres colchonetas, dos flotadores, una "burbuja" de mochila y una mini Zodiac con remos. "Ya ves, preparando la piscina para los chicos. Hoy vienen todos a pasar el día; vamos a hacer una barbacoa", me dijiste cuando te di los buenos días. Nos fuímos al pueblo en bici, desayunamos, compramos los periódicos. Y allí me tuviste media hora, esperando a que abrieran la carnicería, mientras me contabas lo difícil que se están poniendo otra vez las cosas. Por la noche supe que tus hijos se disculparon, que habías encargado una paella, y que te pasaste el día entero llorando en la bañera con espuma hasta el cuello." (Encontrado dentro de uno de los volúmenes pequeños de las Obras Completas de Gabriel y Galán; en una estantería familiar. No sé quién lo escribió)
"Cuando yo era niñodiós, era Moguer, este pueblo, una blanca maravilla; la luz con el tiempo dentro. Cada casa era palacio y catedral cada templo; estaba todo en su sitio, lo de la tierra y el cielo..." Juan Ramón Jiménez
Cuando yo era niñadiós, no era Moguer, sino Perobequez, la finca de mis abuelos, el paraíso donde la luz, el tiempo y toda aventura era posible. Y teníamos una burra. Se llamaba Luna. La-luna, si somos propios.
La enjaezaban para nosotros con unos arreos que se enganchaban a un carrito que José, el herrero, había hecho siguiendo las instrucciones de la abuela. Nunca hubo una burrita más amable, más paciente y dócil. No sé quién le puso el nombre, ni qué razón le llevó a hacerlo. Pero creció con nosotros y no había paseo al monte al que no nos acompañara. A veces arrastrando el carrito con los hermanos pequeños dentro, a veces andando al lado, como si fuera un perro.
El día que entraron a robar y dejaron todas las puertas y cancelas abiertas... fue ella la que esperó en el patio grande a la guardia civil.
Hoy ya es otro día. Ayer vaciamos, mis hermanos y yo, una vieja nave donde nuestros mayores habían guardado los restos y vestigios de Perobequez. Muebles, mármoles blancos que fueron encimeras, seras del molino, serijos, hierros y rejas, trillos y aperos para aventar el trigo en las eras, y en un baúl los arreos con cascabeles de la Luna. "No los toque. Eso no", dijo la voz de I. al gitano.
Fue llegar a casa y tras una ducha que se llevó por el desagüe los recuerdos, el olor y el último vínculo con aquel tiempo.... coger los álbumes y vernos, todos allí. Estaban los que eran. Y nosotros con ellos. Y en una, pequeños y sentados sobre un rodillo de piedra, mi hermano I. y yo -diminuta y con trenzas- acariciábamos bajo la atenta mirada del fotógrafo, la cabeza, suave y fiel de nuestra burrita.
Se la mandaré, QuiaSint. Quizá sea lo que palie cualquier daño que mi torpeza, ayer al no medir lo que estaba contando, haya hecho en una Luna cálida y callada que desliza su sombra por su casa.
55 comentarios:
estamos de luto.
¿Sabe Ud., querido Bolo, que el robot de miarroba -ese ente impersonal pero de leal memoria- acaba de felicitarle el cumpleaños a fusa (7)?? Parece mentira.
Eso suma 9 años desde el inicio en el proceloso y divertido Mundo Clásico.
Tempus fugit, amigo mío. No sólo para los grandes escritores, como Delibes. Sino para los pequeños garabateadores de momentos, y para los enredas virtuales.
Así que hoy, Sr.mío, siete años después y tal como hizo Miguel D'Ors con la lecherita de Burdeos en aquel Ubi Sunt imperecedero.... no puedo más que decirte:
Ya lo ves: toda aquella
gente rica que a tí te confundía
con un poco de nada,
con los muros cubiertos de verdín de las calles,/
con los brillantes prados
de las afueras, toda aquella gente,
sus pelucas, sus bailes, sus libros, sus modales/
delicados, sus coches, sus cadenillas de oro,
sus chocolates, su fraternité...
son ya -que pronto- polvo olvidado en el polvo./
Y aquí estás tú, con tu mirada ardiente
y tus mejillas de manzana girondina,
con diecinueve años eternos.
Quién te hubiera
dicho que ibas a ser lo único que quedase
de aquel mundo
aquel día en que aquel extranjero
viejo, gruñón y sordo se empeñó en retratarte.
......aquí estamos, amigo mío. Mientras dure la intención y la memoria.
it
Me llamarán duro de corazón, pero no me conmueve la muerte de los viejecitos. Lo que me conmueve es que los mantengan cuando no tienen ganas.
Y es que los que te rodean se ponen muy pesados con lo que llaman "tu salud", pero en realidad es "tu mantenimiento sea como sea". Yo creo que les da pereza y grima incinerar.
Y oigan, no lo nieguen, ustedes se conocen de hace mucho.
Cuenten, cuenten.
No puedo discutir contigo, Nan. No y no. No puedo (qué fastidiooooo!).
No creo que los mantengan, a los viejecitos, por pereza de incinerarlos. Los mantienen porque no quieren desprenderse. Porque no quieren tomar una decisión que duele y de la que serán responsables. Porque prefieren no pensar, no decidir, no contradecir el manual de usos y protocolos médicos.
Por eso es importante hacer un testamento vital.
Dejarlo dicho. Escrito ante testigos. Avisado.
Somos tan responsables de nuestras vidas como de nuestras muertes. Ninguna de esas dos cosas son menos naturales o importantes.
Morir como se ha vivido: decidiendo libremente.
Vivir como se querría morir: enterándose.
Y no, señorito Nan, QuiaSint y yo no nos conocemos: ardería Troya (o Ítaca, ji ji ji....) si fuera de otro modo. Somos sombras, imágenes y vestigios... en huída libre y hacia adelante. ¿Qué mejor compañía se puede tener en esta vida extraña que una con la que no se cuenta?? -Nada más fiel, por mi parte.
Y ahora me piro a Septiembre, que es un remanso calmo y perfecto para poner huevos (con perdón).
;-))
...y lueeeeeeeeeeeeego me tuvieron a mí.
¡Ay, mis paaaaaápals!
:-)
Pd: fin de semana guerrero, presumo, aviso.
...y lueeeeeeeeeeeeeego me tuvieron a mí.
¡Ay, los paaaapáls!
:-)
Pd: fin de semana guerrero, presumo, aviso.
(Y repetitivol, :-))
No me refería a eso, Hit-ita mía. A los finales en los que, como se me pongan tontos, los mato a todos con la barra esa que sostiene los sueros.
Me refiero, porque ya soy un señor bastante mayor de 62 años, a ese no bebas tanto, no fumes nada, no te turbes, ni masturbes ni te pierdas por las noches de las urbes (et orbe).
Y la cosa venía porque hace algo más de 10 años, un amigo mío pintor, para el catálogo de una exposición, contó entre otros, con un texto de Delibes. Me contaba que en cuanto la esposa los dejaba con el café le urgía a mi amigo a que encendiera un cigarrillo para él (Delibes), pero lo colocara en el cenicero de modo que pareciera que lo estaba fumando él (mi amigo).
Me parece patético y en mi santa casa he recurrido muchas veces a esos trucos. Además del de salir cada rato a tomarme un chupito de güisqui y echarme un cigarrito (mi hijo, cuando viene por casa y ve eso me llama "el fuguilas"). A lo mejor don Miguel hubiera muerto hace cuatro años. ¿Mereció la pena ese tiempo de más?
Por otro lado, nada mejor que la compañía de una sombra, así que les felicito. (Aunque mi morbosidad natural de oidor de historias se haya desinflado).
Menos mal que queda por contar la historia de sus viajes en el tiempo. Pero ya que se ha ido a septiembre, dígame, ¿subió el IVA, cayó el cielo sobre nuestras cabezas, Esperanza Aguirre es la Presidenta parala etermidad de la comunidad europea?
¡Madonna del Santo Espíritu! Qué bueno verla por aquí. Niña feliz a la que sus padres la tuvieron. Si pierde su guerra de fin de semana, no se preocupe, lo importante son las batallas. Céntrese en ellas. Los mejores libros bélicos están centrados en las batallas, Waterloo, El Ebro, Las Ardenas...
¿Nueve años ya desde los tiempos de MC? ¡Aquello eran broncas!
Mira, Fusi-Turz, a quién me he encontrado desnuda en las playas de los internés.
http://1.bp.blogspot.com/_i6HAgqddtME/Saa33oY2GeI/AAAAAAAAACc/ApJNYEY8Z50/S220-h/pelo.jpg
Sirwood
Y luego la tuvimos a ella, sip. Xactamente. Faustita mobilette.
Que nació talludita y brincoteante. Viva y llena de letras. Y ahí sigue, una mano en la cazuela, la otra en el matamoscas, los pies en la tierra y la cabeza..... ¡¡vaya a Ud. a saber en cuantas cosas a la vez!!
A veces, Sirwood, tengo que obligarme a recordar que su manejo de alejandrino de los interneses le dejan llegar a playas muy lejanas... ¡quite esa espalda de tatuaje tan reconocible! jajajaaaaa..... ¡ay! el día que no vaya poniendo chinchetas en el mapa virtual habrase acabado el mundo.... ¡¡qué chico éste!!
¿Hit-ita??? ...mira NáN, vas a tener que dar muchas explicaciones, oh, sí-sí.... Nooooo... si Swenks y Szawek sólo te sujetarán los brazos para tu comodidad.... ¿las cuerdas y el cemento?? ....por si te resistes, claro!... explica, explica.... primero lo del " ya soy un señor bastante mayor de 62 años" y segundo: ¿El por qué te dejas mangonear en tu propia casa?
¿Pe, pe, peeee.... PERO A DÓNDE VAMOS A LLEGAR??? Me lo expliques voluntariamente (Swenks, Szawek... ¡achtung! )
;-))
Aaahhh.... que se me olvidaba.... Que no!
Que os galegos.... non temos morriñas da Setembre futuro, ainda del pasado.
E mais en outra casa que a nosa propia.
A mí un bocazasssssss me dejó escrita una cita de Tsun Zú: “Aparece donde no puedan ir, dirígete hacia donde menos se lo esperen”.... y he tenido que tomarme la justicia (poética) por mis fueros. Como un cuco. O un tumor. Tal cual.
it-ísima XD
Para empezar, ser hitita es un lujo hoy en día. Que no lo sepa apreciar dice muy poco de su excelencísima.
Para seguir, Sw y Sz me la pelan, lo digo así de crudo porque ese es el lenguaje que entienden. Solo me dan miedo las SA.
Para acabar, se basan en los 70 cm de arterias de goretex que tengo. No se dan cuenta de que es una suerte porque si hago alpinismo y me quedo trabado en una zona helada, habrá una parte de mí que no se congelará. Así que se ponen como basiliscos. Y a mí me gusta que me dejen tranquilo.
Además, me permite vivir una vida de mentiras... Y además soy un blandengue, que tenía que haber cogido el paquete de tabaco y haberme ido de casa. Todo corazón, que soy.
Y como dice el refrán, hit, hit, ita!
UUoooOOO.... (ha dicho "me la pela")
(aquí)
(ufff.... en el obituario de Delibes)
(a la seño vas!)
Empiezo a preocuparme.... la verdad....
No sé si las perrucias del dueño de este blog confundieron una trufa o una criadilla con una mina unipersona.... y que anden los restos de Sirwood (digo de QuiaSint) arrastrados por otras alimañas distintas a las que pululan por la virtualidad.... ¡Oh, mores! (lagrimilla)
it ;-))
Es que se me ha complicado un poco la existencia.
No hubo trufas. Tuve que ir a un entierro donde Cristo perdió el gorro.
Luego enfermó una sobrina y tuvieron que internarla en un hospital. He estado haciendo turnos de noche para cuidarla. Afortunadamente, se ha recuperado del todo. Lo sé, no por el parte médico, sino porque ha vuelto a hablar por los codos; a todas horas, en todo momento y lugar.
Vuelta a la normalidad. ¡Por fin!
Sirwood
Jo, Sirwood, es usted todo un Tío. Me alegro por la chica. A ver si con suerte, de tanto hablar la tiran del hospital, porque huelen a desinfectante y cocinan de pena. (y no hay manera de fumar a las escondidillas).
Ya la han despachado (gracias por el interés). Ahora habla más y mejor. Y dice que de mayor quiere ser doctora (médica, dice).
¡Ah!, se me olvidó decirles: el entierro era con acompañamiento de banda de música desde la iglesia hasta el cementerio. Una chulada. Me voy a pedir uno así.
Así es como deberían ser todos los entierros: con pompa, boato y banda de musica.
Hay entierros sorprendentes.
Y también funerales.
Recuerdo uno que me dejó particularmente pasmada. Fue hace unos diez años. Se había muerto el padre de una chica que había sido novia de varios de mis primos... sí. Parece que le gustaba mi familia. Ahora anda por ahí, en los periódicos, dando guerra con cosas de arte moderno....
La cosa es que, hacia el final del funeral, se levanta (la chica) muy seria, se dirige al púlpito, le hace una señal con la cabeza al sacerdote, saca un papel y empieza a desgranar su particular "ubi sunt". -Temo esos momentos, desde aquel día.-
Todos los fieles (y algún pagano que también había ido a acompañarles en el duelo) estábamos compungidos y expectantes.... La chica empezó a hablar:
"Papá, cuánto te queríamos.... y ta, ta, ta.... me enseñaste a colocar los pies en los estribos.... ta, ta, ta..... aún recuerdo lo que te comiste la última noche: un plato con guisantes y sus trocitos de jamón, un buen solomillo de unos 400 gr. medio hecho y con patatas. La ensalada, con sus anchoas y su tomate. El flan de huevo de tamaño mediano, el yogur, el plátano....."
Medio funeral se fue a un restaurante, a continuación.
Cosas de la pena, supongo.
it
Así es como deberían ser todos los entierros: con pompa, boato y banda de musica.
Hay entierros sorprendentes.
Y también funerales.
Recuerdo uno que me dejó particularmente pasmada. Fue hace unos diez años. Se había muerto el padre de una chica que había sido novia de varios de mis primos... sí. Parece que le gustaba mi familia. Ahora anda por ahí, en los periódicos, dando guerra con cosas de arte moderno....
La cosa es que, hacia el final del funeral, se levanta (la chica) muy seria, se dirige al púlpito, le hace una señal con la cabeza al sacerdote, saca un papel y empieza a desgranar su particular "ubi sunt". -Temo esos momentos, desde aquel día.-
Todos los fieles (y algún pagano que también había ido a acompañarles en el duelo) estábamos compungidos y expectantes.... La chica empezó a hablar:
"Papá, cuánto te queríamos.... y ta, ta, ta.... me enseñaste a colocar los pies en los estribos.... ta, ta, ta..... aún recuerdo lo que te comiste la última noche: un plato con guisantes y sus trocitos de jamón, un buen solomillo de unos 400 gr. medio hecho y con patatas. La ensalada, con sus anchoas y su tomate. El flan de huevo de tamaño mediano, el yogur, el plátano....."
Medio funeral se fue a un restaurante, a continuación.
Cosas de la pena, supongo.
it
Coño, pues el de mi padre fue así, con la banda municipal y un coche funerario tirado por caballos negros. Como tenía 11 añitos, me enviaron a casa de mi amigo Fernando. Los dos padres trabajaban en la Junta de Obras del Puerto (bueno, el mío ya no) y teníamos permiso para entrar en el puerto a jugar. Cogimos las bicicletas y nos fuimos hasta el faro. Armados con piedras, nos quedamos inmóviles esperando que un pez se acercara a la superficie y le pudiéramos acertar.
De pronto, sonaron las campanas de la concatedral y le dije a Fernando que seguro que era por mi padre y quería ver el entierro. En el tiempo en que el cortejo recorría los 300 metros escasos que había de mi casa al principio de la Rambla, hicimos los más de tres km hasta el mismo lugar, llegando sudorosos y con la camisa fuera de los pantalones. Se había formado una fila de gente y yo insistía en pasar, sin soltar la bicicleta, a primera fila. Cuando me reconvinieron hice valer mis derechos con un "Es que el muerto es mi padre". La mentira y falta de respeto del pillo fue debidamente castigada. Me dieron una somanta de hostias. Pero entonces Fernandito, que sí me reconocía la posición de privilegio, se hizo cargo de las dos bicicletas y me encaramé a una de las ventanas del Banco de España, desde donde lo vi todo estupendamente.
El mío murió cuando yo tenía 12 años. Lo recuerdo todo como una nube. Te marca para toda la vida.
Y yo, sin embargo.... podría describir minuto a minuto todo lo que pasó... y con qué velocidad se fueron dispersando unas queridas cenizas, por el lecho de un río truchero de Sanabria.
Ayer estuve sentada en un banco de piedra que está muy cerca de donde ella descansa. Era uno de esos días duros-duros, de cuando la vida se pone de punta y te clava una arista: así que, también, necesité ponerme un viejo sueter de lana de él. Uno que me quedé, por las buenas, cuando él vivía (porque estaba de moda).
Así que dejé pasar los minutos esperando que todo hiciera su efecto. Y lo hizo. Es un sitio muy vivo, donde los muertos descansan.
Me gusta leer las palabras que grabamos sobre la piedra. Unas que encontramos escritas en un papelito guardado en su boureau: " Señor dame serenidad para aceptar las cosas que no tienen remedio; valentía para cambiar las que se puedan, sabiduría para reconocer la diferencia".
Me pregunto cómo puede ser que a la distancia diariamente yo recorra los recuerdos como si estuvieran presentes. Y hay noches que me despierto.
Sí.
Y sentada en la oscuridad, envuelta en las sábanas, intento recordar qué es lo que me estaban diciendo.
Y es misterioso todo. Misteriosa la alegría que no puedo contener, cada día, y que no tiene motivos concretos.
Misterioso el efecto de las palabras de la tumba de mi madre que me ayudan a aceptar con serenidad que ella, él y muchos otros ya no están. Y no estarán.
Misterioso como un sueter puede convertirse en un abrazo protector contra el que la esquina más afilada no tiene nada. Pero nada de nada.... que hacer.
;-))
Querido Sirwood: creo que abandonaré ya su Septiembre. Ha sido muy terapéutico. Gracias por dejarme okuparte (a parte de que "me lo debieras"... ja ja jaaaaa.... has sido un sol!)
Mi máxima preocupación era comportarme como John Wayne, que nadie me viera llorar.
De todos modos, mi historia con mi padre fue rara. Y con mi madre. He tenido que hacer una terapia de regresión en Donosti para rencontrame con ellos y entender muchas cosas. Rehacer muchas conexiones. Ahora estoy en paz y visitan mis sueños. Prefiero no hablar de esas cosas sin unas copas delante y otras atrás.
Por cierto, tengo unas historias vitales sobre muerte e infancia, algunas más graciosas, otras menos, que escribo una y otra vez sin llegar a encontrar la perspectiva distante que busco. La del entierro de mi padre empezó con 8 folios y ha ido adelgazando con el tiempo. Pero al escribir el resumen en tu blog, me he dado cuenta de que esa es la versión oficial. El 25 de mayo hará 50 años de su muerte y, si no os parece mal, porque lo había hecho para vosotros, copiaré este comentario en mi blog, dándolo como la versión casi definitiva.
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Menos mal que has vuelto, Dña.Luna!
Había aquí una ausencia enorme (y un desorden!) Todo el tiempo era de día, y las mareas estaban alocadas, y las mujeres -claro-, también...
Me alegro de leerte.
Mucho.
It
Me alegro que la alegre, y también de que haga acto de presencia, y de que cuente.
Pero tenga en cuenta que ha sido un lapsus, lo del descorazonarse; no se vaya a creer (ahora hablo por mí) que soy buena persona por un momento de abatimiento.
Ju ju juuu... ¡y va y lo explica!
Diossssssssssssss.... (que sí existe, por supuesto): ¿Creerás, Sito Nan, que no te hemos visto los paños interiores??? Que me parto! Buena persona hasta el tuétano.
Querida Luna; me ha hecho gracia lo del "horribilis sarcasmus". Y me ha hecho darme cuenta de algo. Desde siempre me han encantado los ogros. Las personas muy-muy antipáticas, las gruñonas.
Resulta que, una vez domesticadas (el truco esta en no tenerles miedo, en plantarles -tranquilamente- cara), son tiernas, profundas, únicas.
Adoro esas personas difíciles porque, generalmente, esconden muchos tesoros.
Cuando me has metido en el mismo saco que a esos dos trotamundos.... he pensado que la edad (provecta, sniffsss!) me está haciendo pasar de ser burlona a ogra.
Ohhh!
Deberé estar atenta: quizá quieran domesticarme con paciencia y muchas oportunidades.
¿Qué es la amistad sino esa oportunidad que das a otro de ser quién es, sin prejuicios?
Pozí.
Explico: Y no por lo de "tierna, profunda y única" (lo de ogra); sino por lo de gruñona. Que mi inmodestia no llega tan lejos... XD
It
Otra cosa: Nansito NO SERÉ YO quien aplique la Ley Sinde sobre los recuerdos de aquel día de su niñez. NO SERÉ YO quien mande cortarle las manos (desde los codos) por atentar contra los sacrosantos copyrights del apartado "comentarios" de QuiaSint.... pa' que vea.
Hale, chinito: valore, valore.......
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El uno tiene un lugar llamado septiembre, la otra un lugar personal.
Está visto que desconozco más de lo que ignoro.
Incluso en esto, posiblemente, me equivoco
Ay, ay, aaayyy... Nansito !! Como diga Ud. una sola palabra más le voy a declarar mi adhesión eterna (de lis buenos ratos que me está haciendo pasar.... Jo jo jooo)
Éstas son las cosas -y no otras- por las que venero internet. Por los enredos "inter nos"
xP
Vaya, Luna, no sabía lo del accidente. Espero que te repongas muy pronto del todo. Nunca he tenido un accidente, nunca he estado ingresado en un hospital, pero después de lo de mi ahijada, he decidido que no quiero. ¡Menudo susto!
A estos dos no les hagas mucho caso, que siempre están chinchando. Si se meten contigo, avisa, que cojo la Guzzi, me presento en Madrid (creo que ya sé por dónde se va) y les arreo un par de soplamocos a cada uno, a ver si despabilan.
Voy un poco acelerado. Mañana me leo los comentarios con detenimiento, a ver si se me ocurre algo que decir (cosa siempre de lo más difícil).
Un abrazo a todos. (A Rosa, que me estará escuchando tras los apuntes, también).
Por no mencionar la sonda del pis. Siempre da la casualidad de que antes de ti iban a operar a uno de esos tíos del porno, que no se prsenta, y como tenían preparada la de su tamaño, por no ir al almacén te la colocan a ti. Mo-les-tí-si-mo.
¿Y qué es la sonda del pis frente al sonido de "te vamos a poner una vía", promesa sutil de que van a dejarte el cuerpo más picado que el brazo de un yonki....????
Ooojjjjjjjjjj..... meseponen los pelos de punta!
En fin. Lo mejor es no recrearnos en los fastidiosos (y a veces inhumanos!) usos y protocolos hospitalarios. Lo mejor es huir o someterse, sin darle un solo pensamiento.
No es fácil, sobre todo si hay que sufrirlos durante tiempos largos. Pero se puede. Y un día, por fin -y aunque te digan "en 6 meses nos vemos"- te dan el alta. Y combatiendo las ganas de esconderte en cualquier selva donde nadie te haga nada más y la espada de Damocles de que alguna célula haya sobrevivido al holocausto de la quimio y de los rayos...
Es curioso, "síndrome de Lázaro", me he enterado que llaman los psiquiatras a los que sobrevivimos a un diagnóstico muy penoso. Supongo que será porque, inconscientemente, al saber que te "fusilarán al amanecer" (que es el anuncio de algunas enfermedades), te despides. Dejas de hacer proyectos, de pensar en el futuro. Así que, una vez aceptado y puesto en orden el entorno, si los ensalmos y emplastos funcionan... el enfermo se siente resucitado (¿Lázaro?) con todos los componentes de incredulidad, culpa, miedos ante lo incierto, etc....
La cosa es que, cuando me contaron ese síndrome, lo entendí al revés (¡lo que hace la ignorancia!); lo asocié con la maravilla de Khalil Gibrán, “Lázaro y su amada"... y aquí, Srs./as. mios/as viene mi recomendación: NO OS PERDONEIS ESA LECTURA!! (es una joya).
Contra cualquier síndrome, la lectura.
Contra el miedo, razocinio.
Me doy cuenta de que es la primera vez que pongo palabras (y no distancia) a este episodio. Quizá porque, después de 4 años, estoy recuperando la voz. Quizá éste -el contarlo- sea el primer síntoma de que estoy entrando, ¿de cabeza? ¿haciendo el pino puente?, en el síndrome lazareño....
¡Mujeres, a mi! ¡Marta! ¡María! ¡Cacho vagas.... ¿ande estais, jodías?!!
XP. (Ay, perdón! ....que me disperso....)
Corrigiendo: (como escribo con un dedo, desde la infumable pantallura de un iPhone, escuchando laxtertulia de Carlos Herrera.... no sé ni lo que digo).
QUE ANDE PONE: ...."(..) espada de Damocles...(..)", el párrafo está inconcluso. Y debería acabar al gusto, claro. Y que el mío, el que quería explicar es: que se puede vivir feliz.
Porque la felicidad, ¡esa intocable!, la llevamos puesta, queridos míos.
Hala.
Vaya, también usted ha sido remendada. Ya pertenece al Club de los Poetas Muertos de Miedo.
(dudoso honor)
¡San Blas!, Fusa, hay que cuidar bien esa garganta.
Sepan ustedes que aquí la joven tiene una voz meliflua y cantarina, como podrían testificar los seguidores de aquel blog sonoro, uno de los primeros en su género, tristemente desaparecido. ¿Te acuerdas?
Por cierto, cuando veas a Pedro Jota, dale un coscorrón de mi parte. ¿Has visto cómo han caído los resultados de El Mundo desde que dejaste de escribir? ¡Será burro el semi-calvo de las narices! ¡ Venga, Ágatha, mándalo a paseo de una vez!
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Cántenos algo, Fusa.
Yo, Luna, me voy unos días al infierno. La costumbre que tiene la gente de viajar, me mata.
Las cuarenta!, NaNsito, las cuarenta!! Esas son las que les voy a cantar!
M-E-L-I-F-L-U-A.... QuiaSint (ese crótalo!) ha dicho "meliflua"! ...en la calle le espero, bicho! y ya vemos quién se lleva el soplamocos, jajajajaaaaa.
Ahora en serio: Hace un mes he empezado (digo empezado.... ¡ojo al verbo!) a cantar. No es la voz de antes, pero no está nada mal -si pensamos que desde que me abrasaron las cuerdas (2) no podía ni tararear en misa-.
Estoy recontenta.
Sip.
Así que lo que dure, será bienvenido.
Nansito: No tengo miedo. Nunca lo he tenido. ¡¡Si leyera "Lázaro y su amada" comprendería qué es lo que yo entendí que era el "síndrome" aquel!! jajajaaaaaa...
¡Vámonos todos a descansar unos días! (paga Luna los billetes....)
Bksssssssss a todos,
it
P.D. Bolo: el semi-calvo me deja enredar en unos y otras de sus publicaciones. Si es bueno (me debe un textículo....) le marco con el dedo una columnilla erotico-zezuah que hice durante unos meses y que ahí anda, para gloria y enseñanza de unos y otros... ji ji ji...
pues avise, que no soy yo muy comprador de ese periódico.
Donde voy, no hay que comprar billetes. Solamente desplazarse a una hora de madrid.
Naturaleza pura y dura. Los cargos y los rangos no sirven para nada una vez que se pasa de las escuelas.
Hay un bar con sabor rancio. Ni tiendas, ni sitio de comidas, ni nada de nada.El bar es el club social, el estadio ( por el futbolin) cuarenta habitantes.
Si lo que les place, es la soledad...tiene su casa allí.
Creo he traspasado mis límites de hablar en el blog. No es habitual que lo haga.
Saludos a todos
Luna
Querida It, no leo periódicos de este siglo, pero si las letras son suyas estaría dispuesto hacer una excepción.
Querida Luna, 40 personas son casi una multitud.
Sirwood
Parece un sitio magnífico, Luna. Cada vez hay menos lugares así. Guarde Ud. las coordenadas en secreto. El objetivo mayor: que se conserve así.
Bolitooooo, mi soooooool ! (me debe un relato) (algún día será mi cumple y Ud. con esos pelossss...!!!)
Pues era yo (la anterior), claro!
;-)). It
Y ustedes ¿cómo estamos?
He vuelto del mundo primigenio, de un pueblo que coincide con el suyo, Luna cascabelera, en que tiene 40 bares. Habitantes, no muchos más, pero se mueven rápido para mantener los bares vivos.
Queremos leer ese texto de la Tauro favorita de este blog. A ser posible, de gratis.
Sirwood, ¿qué dice la Gaçette de Paguí de 1895 acerca del cambio climático?
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Así queeee... en ese pueblo suyo, Nan, cada habitante tiene un bar (o es un bar en sí mismo). Lo que me lleva a preguntar: ¿cómo se mueven?, es decir: se sincronizan para no dejar ninguno desierto, hacen tablas, plannings.... ¡ay, qué sinvivir de pueblo, jopelinessssss!
"Tu depuradora no me había dejado dormir en toda la noche, cosas de los adosados. Así que la pasé en blanco leyendo hasta las tantas el último libro de Savater y engolfado con Internet, viendo los "trailers" de las películas que están estrenando en Nueva York, bajándome el último navegador, escudriñando el informe "secreto" de la Nasa sobre la Luna... en ese plan.
No había amanecido aún y ya estabas en bermudas, al borde de la pileta, azacaneado con el limpiafondos, quitando las hojas de la superficie con el cazamariposas, retirando mosquitos de los "skimmers".
Ayer estaba el agua casi verde y hoy ha amanecido transparente: se nota que el cloro, el algicida, qué sé yo, el elevador del ph, han hecho su efecto. Me pareció que la habías rellenado porque quedaban rastros de espuma en la superficie: un día me contaste que el agua de esta "urba" tiene muchos carbonatos y hay que precipitarlos con alúmina.
Amorosamente esparcidos junto a bordillos y escalerillas pude ver cuatro manguitos de los de aprender a nadar, tres colchonetas, dos flotadores, una "burbuja" de mochila y una mini Zodiac con remos.
"Ya ves, preparando la piscina para los chicos. Hoy vienen todos a pasar el día; vamos a hacer una barbacoa", me dijiste cuando te di los buenos días.
Nos fuímos al pueblo en bici, desayunamos, compramos los periódicos. Y allí me tuviste media hora, esperando a que abrieran la carnicería, mientras me contabas lo difícil que se están poniendo otra vez las cosas.
Por la noche supe que tus hijos se disculparon, que habías encargado una paella, y que te pasaste el día entero llorando en la bañera con espuma hasta el cuello."
(Encontrado dentro de uno de los volúmenes pequeños de las Obras Completas de Gabriel y Galán; en una estantería familiar. No sé quién lo escribió)
"Cuando yo era niñodiós,
era Moguer, este pueblo,
una blanca maravilla;
la luz con el tiempo dentro.
Cada casa era palacio
y catedral cada templo;
estaba todo en su sitio,
lo de la tierra y el cielo..." Juan Ramón Jiménez
Cuando yo era niñadiós, no era Moguer, sino Perobequez, la finca de mis abuelos, el paraíso donde la luz, el tiempo y toda aventura era posible.
Y teníamos una burra. Se llamaba Luna. La-luna, si somos propios.
La enjaezaban para nosotros con unos arreos que se enganchaban a un carrito que José, el herrero, había hecho siguiendo las instrucciones de la abuela.
Nunca hubo una burrita más amable, más paciente y dócil.
No sé quién le puso el nombre, ni qué razón le llevó a hacerlo. Pero creció con nosotros y no había paseo al monte al que no nos acompañara. A veces arrastrando el carrito con los hermanos pequeños dentro, a veces andando al lado, como si fuera un perro.
El día que entraron a robar y dejaron todas las puertas y cancelas abiertas... fue ella la que esperó en el patio grande a la guardia civil.
Cosas se acuerda uno de repente...
Hoy ya es otro día.
Ayer vaciamos, mis hermanos y yo, una vieja nave donde nuestros mayores habían guardado los restos y vestigios de Perobequez. Muebles, mármoles blancos que fueron encimeras, seras del molino, serijos, hierros y rejas, trillos y aperos para aventar el trigo en las eras, y en un baúl los arreos con cascabeles de la Luna. "No los toque. Eso no", dijo la voz de I. al gitano.
Fue llegar a casa y tras una ducha que se llevó por el desagüe los recuerdos, el olor y el último vínculo con aquel tiempo.... coger los álbumes y vernos, todos allí. Estaban los que eran. Y nosotros con ellos. Y en una, pequeños y sentados sobre un rodillo de piedra, mi hermano I. y yo -diminuta y con trenzas- acariciábamos bajo la atenta mirada del fotógrafo, la cabeza, suave y fiel de nuestra burrita.
Se la mandaré, QuiaSint.
Quizá sea lo que palie cualquier daño que mi torpeza, ayer al no medir lo que estaba contando, haya hecho en una Luna cálida y callada que desliza su sombra por su casa.
¿Y le importaría mucho que el anfitrión la publicara?
Desmerece la calidad de las fotografías que el anfitrión (¡cómo me hace sentir "parásito", lo del anfitrión, cachissss....!) publica en este blog.
Pero se la mandé para que la usara a voluntad porque yo no tengo el email de la nuestra, la que ilumina las sombras nocturnas.
Eso sí: Ni se imagina qué piernas tenía yo a esos años mozos!!!
It. ;-))
¡Dele no más, Anfi!
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