Demuestra que no eres un Robot
Así nos interpelan ahora los Robots ciberesféricos si queremos comentar algo en un blog. Los mismos Robots que nos permiten este estéril desahogo del blog, esta penosa engañifa a nuestra insignificancia, este trampantojo poblado de clics, nos reclaman el santo y la seña de que no somos como ellos. Verás, Señor Robot, no estoy tan seguro de no ser un autómata. Minino y despreciable, sí, mas autómata. Tanto es el frío que extramuros se siente. Robots que desconfían de robots. El robot es un lobo para el robot. ¿Quién va?, igual que en el arranque de Hamlet, nos inquieren los Robots vigilantes de la ciberplaya. ¿Sueñan los Robots de la Ciberplaya con misses eléctricas que les hagan cosquillitas en su electrónico perineo? Seguro que sí. Demuéstrame tú, robot, que soy algo, que toda la rabia y el desconsuelo y la desesperanza que a mi través se agita consisten en realidad en algo. Cómo podría engañarte robot mío y colártela como humano, siendo la nada que soy. Demuéstrame tú que eres un robot, y que tienes por tanto mejores sentimientos que los míos: eso me gustaría decirle a mí a las centralitas telefónicas cuando llamas para una urgencia, al cajero automático que no entiendo, al ordenador que por mí escribe cuando le da la gana. Al mundo, al que tan indiferente siempre resultamos: demostradme, criaturas antipáticas, que no sois un robot. Nos exigen los robots, que son quienes escriben ya, mezclando al azar las palabras, los mejores poemas, una demostración de que no somos ellos, pero qué somos ya todos sino replicantes prolongaciones suyas. Nada de lo robótico nos es ajeno.
José Antonio del Pozo
José Antonio del Pozo
13 comentarios:
No tengo nada que demostrar
Soy un robot.
Buenos días, bip, bip
No sé que decirle, Sir. Últimamente, me siento programada como un robot. Me organizan tiempos y tareas, me llevan y me traen... pero ¡En fin! Sobreviviré.
Yo estoy agotadísimo, tenemos bajas en la empresa y el trabajo nos desborda; aparte de que los años también pesan y todo me cuesta hacerlo mucho más que antes. Ese es uno de los motivos de lo abandonado que está este blog.
Por orden de aparición:
Luna: te daba por desparecida. No sabes lo que me alegra volver a verte, aunque sea en estado androide.Bip, bip.. un afectuoso abrazo para ti y para los tuyos.Supongo que para Semana Santa te deslocarizarás a La Alpujarra.
Foster: Júreme por el Padre Pío que va a sobrevivir; en estos momentos necesito saber que hay gente capaz de hacerlo. :-)
¡Jolín, 1 de marzo ya!
*Si tienen todos esos problemas, son humanos. No hay peligro de convertirse en robot.
Muchas gracias por su alegría.
Por otro lado.
Se me han saltado los microchip que tengo colocados. No me sale el bip, bip programado. Me sale tres veces, oh oh, oh.
¿Como sabes que voy a la Alpujarra granadina?
Salvo que
Salvo que
Salvo que...
Voy a reprogramarme. No quiero ni pensarlo.
Un abrazo
Tenga la certeza de que lo voy a intentar, Sir. Ya le contaré si lo consigo.
Sé que veraneas en La Alpujarra granadina porque tú misma me lo dijiste, lo que pasa es que no lo recuerdas. No he estado nunca en La Alpujarra, pero me han dicho que es una zona muy bonita. Tendré que darme una vuelta...si consigo sobrevivir.
Lo conseguirá, Foster, estoy seguro.
Para animarla, le voy a poner un faro.
Entonces me alegro.
Soy despistada. Si no tuviera memoria, mal asunto.
¿ No conoce esa zona? Merece la pena perderse por allí, todavía.
He subido al Mulhacen varias veces y siempre he hecho noche en el refugio del Poqueira.
Espero te encuentrs más descansado
Un abrazo
¿El Mulhacén? ¿Aún no lo han vendido?
ret5y
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